Todo lleva al fin
Regreso a esos lugares a los que nunca he visitado donde hay hierba crecida y árboles veteranos. Siempre regresamos como memoria muscular: Palpitando Caminando Extendiendo, existiendo existir sin mareo mar del que no nos salvamos latente e infalible Maquinaria Perfecta. Anidar en el pecho de la tierra olvidando al superhombre repitiendo la vida como mantra la nostalgia es algo que no nos enseñaron la portamos sin el menor cuidado sin cubrebocas, sin pañuelos y sin lavado. Repetimos sin saber sentimos sin haber sentido antes la hierba crecida sólo existe paciente nos susurra a través de los pies desnudos en la tierra obscura. Ya no son suelas las que pisan el concreto sucio ahora es la suciedad ondulada de espirales interminables la suciedad que tanto se necesitaba para recalcar la débil existencia del olvido. Allí se encuentra una respuesta que vibra al ritmo del Misterio de la vida de la inconsciencia de la memoria