Necesidad
La piedra que piso, forma las calles de una realidad que conozco y otra realidad que no conocí. Sin embargo, sé que está presente porque veo el caminar de la gente; veo los vidrios rotos por los temblores y los pilares resquebrajados y desvaídos. Están los suspiros, los debates, las risas, los gritos, y todos los registros de la cotidianidad de los que ahora son fantasmas y los que no. En cada rincón de Santa María la Ribera están las preguntas constantes: ¿Cómo? ¿Qué? ¿Cuándo ¿Quiénes? Los edificios cuentan la historia y la gente la niega o refuerza con su andar. Los árboles aportan ideas también, cuando tocan mi ventana con sus ramas sin pájaros, y a su vez, yo les pregunto: